Manual de improvisación (segunda parte): ¿Hacia dónde va Perú Posible?

Hace menos de dos meses, publicamos un artículo en el que se detalla lo ocurrido con la candidatura presidencial del partido oficialista. Aquí, la continuación de las ocurrencias dentro de PP, sin candidato presidencial y sin mayores posibilidades para las elecciones de abril.

Después de la frustrada candi-natura de Jeannette Enmanuel, Alejandro Toledo convocó al que fuera uno de los críticos más acérrimos del régimen y de PP para que sea su candidato presidencial. La candidatura de Rafael Belaunde no despertó grandes entusiasmos en la dirigencia de PP, pero finalmente fue aceptada. Sin embargo, lo que muchos de la dirigencia de PP no imaginaban, era la campaña para depurar la lista de precandidatos al Congreso de personajes indeseables que inició Belaunde. Probablemente conocían sus demandas al respecto, pero no consideraron la determinación con la que reclamaría que los candidatos sean intachables y de indiscutible solvencia moral.

Esta descripción no alcanza a varios de los actuales congresistas del partido de gobierno. Para Belaunde, Víctor Valdez, Enith Chuquival y Gerardo “por Dios y por la plata” Saavedra definitivamente debían ser removidos de la lista de precandidatos. Lo mismo debía ocurrir con Doris Sánchez y José León. Finalmente, Valdez y Chuquival decidieron no postular en abril del 2006. Saavedra, por otra parte, intentó agresivamente mantenerse como precandidato, pero la dirigencia del partido decidió que no lo seguiría siendo. Sánchez buscaba, asimismo, mantenerse como precandidata al Congreso por Lima.

Finalmente, ocurrió lo que se preveía. Según el partido oficialista, se le pidió que declinara a su candidatura. Según Belaunde, él renunció. Para la dirigencia de PP, Belaunde había complicado demasiado el panorama, y no estaba mejorando en las encuestas. Sus críticas a la lista de precandidatos habían causado más de un problema para Toledo, presidente y fundador del partido. El jueves 2, Rafael Belaunde presentó su renuncia ante el Jurado Nacional de Elecciones, y PP se quedó sólo con lista para el Parlamento.

Aparentemente, la noticia de la salida de Belaunde a algunos “desembarcados” les sonó como una invitación a regresar a la lista de precandidatos al Congreso. Saavedra aseguró, en claro desafío a la dirigencia de su partido, que postularía sí o sí al Parlamento Andino. Esto, a pesar que el secretario general de PP, Javier Reátegui, anunció que había sido separado de esa candidatura por el Comité Ejecutivo Nacional (CEN).

Doris Sánchez, como Rafael Rey, terminó con el “premio consuelo” en el que al parecer se han convertido las candidaturas al Parlamento Andino. Habría acatado “disciplinadamente” la decisión del CEN respecto a su candidatura. Pero al final, lo importante parece ser el hecho que está postulando. José León quedó definitivamente eliminado de la lista de precandidatos, al igual que Saavedra.

La posibilidad de pasar el 4% de votos necesarios para entrar en la repartición de curules del Congreso parece bastante remota, pero muchos parecen esperar repuntes milagrosos en las encuestas producto de su labor congresal. ¿Hasta qué punto puede llegar a desintegrarse Perú Posible antes de desaparecer del mapa político? ¿Podrá sobrevivir el partido oficialista si no tiene curules en el Congreso que “motiven” la adhesión de sus miembros? No son muchas las expectativas que se tienen respecto de un partido que aprovechó la ola de la democracia después de la dictadura fujimorista. Reátegui ha atribuido la crisis del partido a la falta de tiempo de Alejandro Toledo. Más bien la crisis de PP ha sido causada por la inexistencia de una estructura partidaria real.

¿Y regresará la alianza con el FIM? Al parecer Fernando Olivera no descarta que “donde hubo fuego, cenizas quedan”. Por ahora, a PP le queda prepararse para las elecciones del 2011, si es que todavía sigue siendo un actor en la política peruana.

Mariana Olcese

Ver también “Manual de improvisación: la candidatura presidencial de Perú Posible”

2 thoughts on “Manual de improvisación (segunda parte): ¿Hacia dónde va Perú Posible?

  1. Saludos

    El partido de Toledo, con el nombre que sea, nunca tuvo un electorado “real”, dos veces que se presentó con resultados más bien discretos, y luego, sin querer queriendo, se vio en segunda vuelta con Fujimori, presentándose como algo nuevo, siendo ya un experimentado candidato (otra cosa no había hecho, pero candidatear ya se le daba “bien”), realmente no era un nuevo actor, sino uno viejo, sin un plan o ideología claramente distinguible, que aprovechaba un momento electoral “propicio”. Así llegó a presidente.

    Ahora vuelve a lo que fue, pero sin el crédito de “lo nuevo”, un partido que debe luchar para sobrevivir, que, en otros momentos (sin contar con el “2000”, su mejor momento fue en el 95, cuando, en alianza con CODE, sacó un 4.15% de votos)…

    No sé por qué apoyaron la norma del 4%, no sé si fue estupidez o simplemente pensaron que sería un porcentaje fácil de saltar. Hay que pensar que los mayores “valuartes” del PP se fueron del partido, esto es, son “tránsfugas” de esos, contando a la congresista con más votos de todo el congreso, acutalmente una de las mayores opositoras del PP. Ellos han firmado su propia sentencia de muerte, y luego, eso sí, se quejarán de la valla y de lo poco representativa que resulta. Sobre todo si se quedan rozando la misma.

    Es un partido que realmente no es partido, más parece (y siempre lo ha parecido) una plataforma de gente más o menos conocida para presentarse a lo que sea, en donde no hay pluralidad, ni democracia interna, ni tantas cosas que dicen tener (mírese los problemas gordos que tuvieron en las elecciones internas, para que luego, encima, todo funcione a dedo y al final el candidato presidencial se retire de la partida). Si no saben ni montar un partido ¿Cómo es posible que les hayamos dado el timón del país?

    Hasta Luego ;)

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