Así se llamaría a lo que hizo la periodista Claudia Cisneros en TV, el miércoles tres de este mes, cuando lanzó al aire la noticia que pronto habría un gran terremoto en el Perú.
Cisneros citó una noticia del website del diario español El País, que hacía referencia al polémico geofísico estadounidense Brian Brady y su predicción que habría un gran sismo en la costa central peruana. La noticia sí estaba en Internet, pero la doñita no se dio cuenta que estaba fechada al 28 de enero de 1981.
Por fortuna, Cisneros no causó pánico en la gente, porque su noticia fue rápidamente invalidada.
Pongámonos en contexto: en 1976 Brady, funcionario del US Mines Bureau, publicó en una revista científica su predicción del terremoto, entre 8.9 y 9.5 escala Richter, con dos fortísimas réplicas. A inicios de 1981, en entrevista para la revista Caretas, Brady se reafirmó y, contra el conocimiento científico, dio fechas: el 26 de junio, con réplicas el 10 de agosto y el 16 de septiembre. Además, habría un gran maremoto que destruiría el Callao y otros puertos del litoral.
De inmediato, la TV y los periódicos sensacionalistas hicieron eco de Brady y el temor empezó a cundir en los habitantes de la costa central, especialmente Lima y Callao. El gobierno de Acción Popular, por si las dudas, organizó simulacros de evacuación en edificios públicos y escuelas. La Marina de Guerra repartió folletos a los chalacos sobre qué hacer en un maremoto.
A medida que se acercaba la fecha del terremoto, muchas personas dormían con “un ojo abierto”. Otras guardaban alimentos, agua, linternas o velas y aparatos de radio. Varias querían viajar al interior del país. Los vuelos comerciales al Perú disminuyeron y se cancelaron muchas reservaciones en hoteles. El embajador estadounidense en Lima informó al presidente Fernando Belaunde que esa predicción no tenía sustento científico ni respaldo gubernamental. Brady fue retado a debatir por el Director del Instituto Geofísico del Perú, pero no respondió. Un colega suyo, que había avalado su trabajo, se retractó públicamente.
Claro, no hubo terremoto. Brady pasaría varios años más prediciendo sismos que no ocurrieron y acaparando titulares en la prensa amarilla de los Estados Unidos, mientras en el Perú dejó varios traumas psicológicos, algo de psicosis y mucha ansiedad.
Ojo. En 2004 el periodista César Hildebrandt, a raíz de la débil denuncia del periodista Carlos Spá sobre la vinculación del presidente Alejandro Toledo con el caso “fábrica de firmas” del movimiento País Posible, alertó que si el periodismo peruano se volvía más irresponsable y sensacionalista, sirviéndose de nuestra poco instruida sociedad, llegará el día en que nadie le creerá a la prensa.
Imagen: El terremoto de San Franciso (fuente: Wikipedia).