Sí hay decencia en política


Cierto, aunque no lo crean. Para rebatir el pesimismo y la desconfianza, a continuación unos lindos ejemplos históricos que comprueban lo que digo.

En 1904, el presidente José Pardo y Barreda caminaba por la tarde con su escolta por el ahora Jirón de La Unión en Lima rumbo al Club Nacional. De pronto, un hombre se le acerca y lo abofetea. Los guardias agarran al agresor para entregarlo a la gendarmería. Pardo y Barreda, sin embargo, no se inmuta. Se arregla el traje de etiqueta, se acomoda el sombrero de copa, se aproxima al detenido y le dice: “Tiene Usted suerte que yo sea el Presidente de la República, porque no le puedo responder”. Luego ordena a su escolta que suelte al sujeto y continúa su camino. De inmediato, los transeúntes presentes lo aplaudieron.

De otro lado, durante la campaña electoral de 1931 entre Víctor Raúl Haya de la Torre por el APRA y el ex comandante Luis Miguel Sánchez Cerro por la Unión Revolucionaria, principalmente, los apristas dieron muestras de respeto al férreo contendor. Pese a que Sánchez Cerro no vacilaba en utilizar un lenguaje vulgar e insultante contra todos sus opositores (“ratas”, “sanguijuelas”, “parásitos”), algo que le ganó simpatía popular, los apristas nunca lo insultaron. Inclusive, el periódico aprista La Tribuna en ningún momento se refirió a Sánchez Cerro como “el Mocho”, un apodo que el ex militar se había ganado por su participación en el golpe de estado de 1914 (cuando perdió el dedo índice de la mano derecha) y que él odiaba.

Asimismo, en 1948 José Luis Bustamante y Rivero fue sacado a la fuerza de Palacio de Gobierno por el general Manuel Odría. Sin embargo, el ex Presidente de la República jamás insultó o habló mal del militar golpista, pese a la injustificable traición.

Volviendo a Haya de la Torre, en 1978, al inicio de la Asamblea Constituyente, el líder aprista fue fuertemente calumniado por el ex guerrillero y constituyente trotskista Hugo Blanco. Cansado de las agresiones verbales, Haya de la Torre citó a Blanco a su despacho asignado en el Palacio Legislativo como Presidente de la Asamblea. La conversación duró muchas horas. De esa fecha y para siempre, Blanco nunca más volvió a atacar a Haya de la Torre. Años después, Blanco confesó que en esa reunión privada él y el fundador del APRA limaron asperezas y quedaron en buenos términos.

Por último, en 1983 el presidente Fernando Belaunde estaba en Moquegua inaugurando obras de construcción. Mientras saludaba a la multitud reunida, de pronto un grupo empieza a manifestar su rechazo a la visita con pifias y silbatinas. Belaunde se percata de la protesta y de inmediato se dirige a donde se hallan los manifestantes. El Presidente de la República se acerca al líder de la protesta y le extiende la mano. El hombre dudó un minuto, pero al final correspondió al saludo. Los manifestantes empezaron a lanzar vivas a Belaunde.

Así como estos ejemplos históricos, hay muchos más. Alguien dirá que todo tiempo pasado fue mejor. No obstante, si alguna vez hubo decencia en política, ¿por qué no podría volver a haberla?

Por Gian Carlo Orbezo Salas

Imagen: Foto de Fernando Belaunde (fuente: Caretas)

4 thoughts on “Sí hay decencia en política

  1. Soy aprista desde 1,959. Admiro a Vic tor Raul Haya de la Torre y Tambien al Arquitecto Fernando Belaunde Terry. Escuche los sabios coloquios de Victor Raul. Soy Licenciado en Administracion, en cierta ocasion como quiera que soy amigo de un ilustre arquitecto, me invito a una ceremonia en el Colegio de Arquitectos, que solo asistian arquitectos, ya en el colegio todos esperaban la llegada de alguien importante, en eso aparece Don Fernando Belaunde Terry y saludaba a todos en eso se acerca a mi, me abraza fuertemente y me dijo: Que gusto tenerlo aqui arquitecto.

  2. Hola amigos de peru politico, soy Acciopopulista con 9 años de permanencia en el partido creo que hay decencia en las filas que pertenesco, mas alla de ello con la doctrina del Sabio Fundador Arq. Fernando Belaunde, el peru como doctrina y la conquista del peru por los peruanos, ello muestra la grandeza de su pensamiento, la fortaleza del potencial peruano en la globalizacion, soy de la selva central gracias a este caballero de la politica contamos con carreteras y mucho mas. De igual modo mis respetos a todos los partidos serios del Peru liderados por sus fundadores.
    Elias Garcia Paredes

  3. Ahora que Perú es líder en desarrollo, los gobernantes deben preocuparse para que todos los peruanos mejoren su economía, y preocuparse también por una buena EDUCACIÓN. Hay un sindicado sutep, dominado por el partido ultra radical maoista patria roja, que desde hace más de 30 años siembran ignorancia en nuestra juventud, son los responsables de más del 70% del fracaso educativo, en América Latina somos los últimos, creo que solo le ganamos a Haití. Y si hablamos de nuestras universidades, dentro de las 1000 mejores Universidades del mundo no figura Perú. Así estamos, Gobernantes despierten. En otra oportunidad hablaré de la Cleptocracia y Oclocracia.

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